PRODUCTOS
Carne
UNA RAZA ÚNICA
Conoce a la Oveja Merina
Para el consumidor, la carne de Merino tiene una imagen de producto natural, saludable y con exclusivas cualidades sensoriales debido al medio natural en el que se cría y la alimentación de que dispone, careciendo de riesgos sanitarios o de fraude en su producción.
Por su precio y la relación producto comprado/ producto consumible puede considerarse como “una carne de lujo”, lo cual, resalta la importancia de la calidad.
Tradicionalmente, este tipo de carne se ha utilizado con frecuencia para atender situaciones especiales, en las que la demanda tiene más en cuenta la calidad que el precio.
La Merina es una raza única, que requiere de un especial cuidado y protección, no solo por formar parte del patrimonio genético español, sino por otros muchos aspectos que la hacen destacar por encima de otras razas. El tipo de alimentación del ganado tiene repercusión sobre la composición de ácidos grasos y la grasa intramuscular, influyendo sobre el valor nutritivo y las características sensoriales de la carne: Respecto al valor nutritivo, cada vez cobra un mayor peso todo aquello que se relaciona con el posible efecto sobre la salud del consumo de la carne y, la proporción de ácidos grasos en la dieta es muy importante para la salud del consumidor. Así, la grasa procedente de corderos criados con pastos, tipificados como cordero tipo pascual, cuya producción en extensivo está muy ligada a la raza Merina, tiene muchas características nutricionales benéficas como son: carne con importantes aportes de ácidos grasos omega 3, con una relación omega 6/omega 3 óptima y enriquecida con compuestos antioxidantes y anticancerígenos como beta-caroteno, vitamina E y CLA.
UNA CARNE CON RAZA
Pero sin duda, los criterios que mayoritariamente determinan que una carne de cordero sea considerada de mala o buena calidad son los que tienen que ver con sus características sensoriales, es decir, con la satisfacción que provoca su consumo. En particular, la carne procedente de corderos Merinos ligeros, más jóvenes, caracterizados por una alimentación basada en cereales y paja tras ser destetados de sus madres, es considerada por ser de mejor calidad organoléptica, más tierna, más jugosa, más suave, con un sabor menos intenso, con menor grado de engrasamiento y un color más claro. En cualquier caso, la pureza de la raza Merina garantiza la mejor carne para cocinar, ya sea a la plancha, a la brasa o a la barbacoa, debido no solo a la forma natural de producirse, sino también a su combinación ideal entre grasa y carne, que le atribuye una agradable e inigualable textura, terneza, buqué y sabor.
100% RAZA AUTÓCTONA
Productos cárnicos con identidad propia
IDENTIDAD PROPIA
Al tratarse de animales criados e identificados en explotaciones extensivas inscritas en el Libro Genealógico de la raza, la calidad de su carne es sencillamente excepcional. Es por eso que el logotipo «100% Raza Autóctona» es mucho más que un simple sello; se trata de un modo de hacer bien las cosas.
CARNE DE ALTA CALIDAD
Estos productos han alcanzado un alto reconocimiento en la industria cárnica de calidad, así como en las empresas hosteleras de más alto nivel y renombre. A los tradicionales asados, chuletas o calderetas, se suman elaboraciones más actuales como hamburguesas, las salchichas o nuggets, formatos muy demandados por las nuevas generaciones.
ASCENDENCIA PURA
Lo que realmente marca diferencia e imprime la calidad es la pureza de la ascendencia. Por eso se garantiza que serán corderos de raza Merina descendientes de padre y madre inscritos ambos en el Libro Genealógico oficialmente reconocido por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, demostrando así su pureza racial.
SUS PROPIEDADES
En cuanto a propiedades cabe destacar la terneza que proporciona la buena crianza, así como la jugosidad, aroma y bouquet derivados de la cantidad y calidad de la grasa.
La carne de cordero Merino se distingue por sus características únicas: finura de la fibra muscular, engrasamiento justo, jugosidad y terneza.
