El macho de la oveja de raza Merina se origina en España a finales de la Edad Media, durante siglos se ha localizado exclusivamente en España, puesto que en aquellos tiempos no se permitían las exportaciones e incluso estaba castigado con la pena de muerte.
Se velaba por la conservación y el privilegio de contar con esta raza por el hecho de ser la única raza de oveja que produce lana desde tiempos remotos, y, además, producen una gran cantidad muy fina y suave. Ya a principios del siglo XIX, la raza de oveja Merina se expande por el resto del mundo.
En la actualidad, la oveja Merina es, probablemente, la raza ovina más extendida por el mundo, en España los principales puntos de oveja (ovis) raza Merina se encuentran en las comunidades autónomas de Extremadura, Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla León y Aragón.
Particularidades físicas del macho de la oveja Merina
El macho de la oveja, también se llama carnero, se caracteriza por sus cuernos largos y curvados, normalmente hacia atrás, pelaje largo y duro, pezuñas partidas, barba estrecha en la mandíbula inferior.
En cambio, el macho de raza Merina se caracteriza por la siguiente descripción morfológica: posee una cabeza ancha y corta, con cráneo muy desarrollado, frente ancha, morro ancho, cuello corto. Existen dos variedades, la blanca y la negra, suelen ser monocolor, aunque algunas veces, las de color blanco son pigmentadas de color rubio o marrón, en orejas, labios o alrededor de los ojos, con pelo rizado y muy fino. Los cuernos son fuertes, de color nácar, en forma de espiral. El macho de la oveja tiene un peso superior al de la oveja hembra, la presencia de los cuernos en éstas es muy rara.
Carácter y funciones de los carneros
Las ovejas Merinas suelen estar en grandes rebaños, prefieren la compañía y cuando se ven solas o aisladas sufren estrés, pánico o incluso depresión.
Se reconocen entre ellas por la visión o el olfato. Los machos identifican a las hembras en celo a través del olor que desprenden, alterando el comportamiento sexual para aparearse.
Los carneros tienen un comportamiento más agresivo en diferencia al de las hembras, sobre todo en la época reproductiva, cuando topan. La actitud de topar entre carneros es normal, pelean para montar a la hembra.
Actualmente la oveja Merina es productora de lana muy fina y suave, carne de muy buena calidad, la de los corderos Merinos se considera más jugosa, tierna y poco engrasada. La producción de leche de la oveja Merina generalmente es pequeña, por lo que se suele usar para la fabricación de queso de oveja de alta calidad.
