Campeón de España de esquileo de ovejas merina
El esquilador de Cabeza del Buey, Manuel María Calvo, se proclamó campeón de España de esquileo de ovejas merinas.
El esquilador de Cabeza del Buey, Manuel Calvo Almena, consiguió alzarse a lo más alto del podio en el Campeonato de España de Merinas XIII Open de Esquileo de Extremadura, que se celebró el pasado sábado, día 2 de abril, en las instalaciones de Salón Ovino de La Serena en Castuera, con la participación de alrededor de medio centenar de esquiladores provenientes de, Castilla-León, Andalucía, Aragón, Castilla la Mancha y Extremadura. Cabe destacar en esta edición la participación de un grupo de esquiladores de Uruguay.
Se trata de la quinta vez que el esquilador extremeño de Cabeza del Buey consigue ganar en la categoría “Open” de este campeonato con el que se trata de reconocer, valorizar y difundir el trabajo de los profesionales de este duro oficio, de cuya pericia depende en buena medida el mejor aprovechamiento de la lana y premiar a los esquiladores quienes demuestran un compromiso por mejorar la calidad de su trabajo.
Según la organización, unas 400 cabezas de ovejas merinas pasaron por las manos de los esquiladores, en las categorías Debutantes (entre una y dos campañas de esquileo), Intermedia (más de dos campañas de esquileo) y Open (esquiladores con varios años de experiencia).
Salón de la Lana
De forma paralela, se celebró el Salón de la Lana, que cumplió cinco ediciones. Incluyó talleres y actividades sobre el mundo de la lana, y atrajo a empresas de primera fila, como Añino Merina, Dehesa Lana, Mi Piel y Charlotte Houman. Todas expusieron sus creaciones sobre la pasarela de moda sostenible. De prendas de vestir a calzado, todo elaborado a base de lana de oveja merina.
El director general de Desarrollo Rural, Manuel Mejías, valoró la importancia de esta pasarela de moda porque “permite mostrar a la sociedad productos elaborados por empresas extremeñas que se dedican a la producción y transformación de la lana, lo que implica sumar un valor añadido a este producto”.
De hecho, cree que el sector de la lana debe avanzar para que todo se pueda hacer en la región. Para ello sería necesario que “los emprendedores y las cooperativas aúnen esfuerzos y con el apoyo de la Administración puedan generar empleo, riqueza y, sobre todo, que el valor añadido de los productos de nuestra tierra se pueda generar aquí y que al final se consiga lo que todos queremos, que es fijar población en el mundo rural”.
Por su parte, el alcalde de Castuera, Francisco Martos, destacó la alta participación de esquiladores, así como el alto número de personas que se acercaron hasta Castuera para presenciar el evento y recordó que “actividades como esta o como el Día del Queso del sábado 9 de abril, además de la edición general del Salón Ovino o la oferta formativa permanente para sector que hace la Escuela de Pastores de Extremadura, junto con los miles de cabeza de ganado que ovino que pastan en el término municipal, nos reafirman en el propósito de que Castuera sea la capital mundial del ovino”.
En cuanto al ranking final del campeonato, el cuadro de honor de la categoría “Debutante” fue copado por el esquilador Uruguay, Jorge Ocampo, seguido de Carlos Romero (Alamillo. Ciudad Real), José Manuel Monterroso (La Granjuela. Badajoz) y Emmanuel Cabrera (Uruguay)
En categoría “Intermedia”, el esquilador de Monterrubio de La Serena, Carlos Fernández, consiguió subir a lo más alto del podio, seguido de Ángel Silvestre (Alamillo. Ciudad Real), Manuel González (Fuente Ovejuna. Córdoba) y Manuel Olmedo (Uruguay).
En cuanto a la categoría “Open”, el esquilador de Cabeza del Buey, Manuel María Calvo, consiguió por quinto año consecutivo alzarse campeón de la categoría reina. En esta ocasión despachó su lote de diez ovejas en un tiempo de trece minutos y cincuenta segundos. Le siguieron Antonio Ruiz (Cabeza del Buey), Rubén Carraco (Valle de La Serena) y Jonathan Calvo (Cabeza del Buey).
El acto de entrega de premios a los ganadores de las diferentes categorías corrió a cargo del presidente de la Mancomunidad de Municipios de La Serena, Jesús Martín y alcalde de Castuera, Francisco Martos.
La prueba de carácter nacional estuvo organizada por la Mancomunidad de Municipios de La Serena en colaboración con el Salón Ovino de La Serena, el Centro de Desarrollo Rural de La Serena, la Escuela de Pastores de Extremadura y el Ayuntamiento de Castuera.
Factores de puntuación
Respecto a los factores que computan para la puntuación del campeonato, el tiempo invertido en esquilar cada lote de ovejas es uno de los factores puntuables, pero no el único ni el más importante, ya que también se computa las pasadas que el esquilador da a la oveja con el peine y el acabado final que presenta el animal. Por el contrario, lo que más penaliza son los cortes inferidos a la oveja, que incluso pueden conducir a la descalificación directa sin profundos.
Por otra parte cabe destacar que, si bien el campeonato de esquileo fue la actividad central de esta jornada en la que se dieron cita multitud de personas para presenciar las faenas de la tradicional esquila, el evento contó con otras propuestas de carácter lúdico-festivo, en la que los asistentes pudieron disfrutar de actividades como el desfile de moda de prendas de lana, visitar los expositores y la exposición artística ‘Las Huellas de la Trashumancia’, admirar las creaciones “Urban knitting” de La Serena Tejida, degustar tapas de queso y productos extremeños o compartir una típica caldereta extremeña IPG Corderex con los esquiladores participantes en el campeonato. También se realizó a modo de exhibición una muestra de selección de la lana una vez de finalizar la esquila de la oveja y el veterano esquilador vallisoletano e impulsor de este campeonato de esquileo, Melquiades Hidalgo, recibió un reconocimiento por su presencia ininterrumpida en esta cita desde sus inicios.
En definitiva, una exitosa jornada tanto por el desarrollo de la prueba y el alto nivel de los esquiladores participantes, como por la asistencia del público que respondió masivamente para presenciar las faenas de la tradicional esquila, ahora convertida en todo un espectáculo a medio camino entre el deporte (esfuerzo, habilidad y lucha contra el reloj), y la exhibición de lo que desde siglos es un duro oficio.